No llevo yo todo este año aceptando dejar el pasado y olvidarme de relaciones que no llegaron a nada, para que vengan Jennifer Aniston y Jennifer López a joderme la vida.
Está la gente entusiasmada con este revival de Jenny from the block y Ben Affleck pero a mí eso de volver con un ex me crea ciertas dudas y traumas que pensaba haber superado. Ya me costó darme cuenta de que los exes había que dejarlos aparcados porque merecemos algo mejor, especialmente cuando te dejan ellos, para ver ahora a Ben Affleck y López dándose arrumacos todo el rato.
Obviamente yo no soy JLo y cuando llegue a su edad, unos 52 con cuerpo de veinteañera, no estaré ni tan en forma ni tan buena como ella, por lo que un ex volviendo a mí como si yo fuera The one that got away no va a pasar. Pero es que si pasara, siempre me va a rondar esta idea en la cabeza «¿no decía yo y me decían mis amigos que yo me merecía algo mejor?» Es que imagínate que el destino te viene y te dice en forma de ex: mira que este tipo que te dejó destrozada y por el que pasaste un periodo de ansiedad y baja autoestima es lo máximo a lo que puedes aspirar.
¿Es que no decía Xoel López aquello de «encontraré algo mejor»? Porque hay amores que no se olvidan pero tras estar en paz conmigo misma pensando que valgo más y que soy como las del anuncio L’Oreal de «porque yo lo valgo», por muy cegada de amor que esté, si vuelvo con un ex sentiré que he fracasado como persona en la vida. Que todas estas enseñanzas no me han servido para nada porque he dado con la misma piedra una y mil veces más.
Y luego viene Jennifer Aniston de la que se rumorea ha comenzado una relación con David Schwimmer, su compañero de reparto de Friends, pareja en la ficción y su, como diría Phoebe, Lobster. El caso es que en la reunión de Friends, que emitió HBO, ambos confesaron haber sentido algo por el otro pero que nunca llegó a nada por las circunstancias, parejas y demás. Y esto era otra lección que yo había aprendido de jovencitas de TikTok: a no idealizar relaciones que nunca comenzaron.
Yo este año que no dejo pasar ni una, que si te me declaras y acabas volviendo con tu ex te bloqueo hasta de LinkedIn no quiero que Ross y Rachel vengan a hacerme pensar en ese amor imposible al que me costó años dar carpetazo. Yo esto lo había superado ya, yo estaba en modo zen. Y otra vez, no soy Aniston y a los cincuenta no voy a ser ese pivonazo y no va a venir nadie a confesarme que lleva toda su vida enamorado de mí en secreto, pero es que no quiero que pase porque esos que no tuvieron valor en su día para quedarse, no pueden regresar cuando ya no les quede nada dónde agarrarse.
En resumen, que me tienen estas dos contentas. Y de ellos no hablo porque mis roles en la vida eran ellas dos. Y porque si me pongo a hablar de exes se me llena esto de insultos y no queremos que Google se ofenda.