Esta maldición hace referencia a la pareja formadad por Maddie y David (Cybill Shepherd y Bruce Willis) en la serie Luz de luna. Como en todas las series, la tensión sexual no resuelta de la pareja protagonista hacía que los espectadores se engancharan a ella. Sin embargo, cuando en la tercera temporada los personajes llegan a tener una relación sentimental, la serie fue perdiendo espectadores y calidad, llegando a ser cancelada pocas temporadas más tarde. Desde aquella fatídica relación, muchos productores de series actuales han sido preguntados por si temen esa maldición. Ellos lo niegan todo.
Pero la tensión sexual no resuelta, o la UST, siglas con la que se conoce a esta expresión, no la pueden negar. Muchas series se basan en ella para el desarrollo de sus personajes y argumentos. Aunque algunas tardan más que otras en resolverla. A Mulder y Scully les llevó siete temporadas, en parte la tardanza se debió a que desde el inicio de la serie, la idea de Chris Carter no era la de crear una tensión sexual entre los personajes. Para ello, ideó que Dana Scully tuviera una relación, pero el novio se quedó en la sala de montaje provocando así, un interés en la audiencia por ver cómo se desarrollaría la química entre Mulder y Scully. Química, que no sabemos si se hubiese visto perjudicada con la inclusión de la pareja de Scully. Otros que han tardado siete años en consumar su relación han sido House y Cuddy. Al principio la tensión entre el personaje de Cameron y House se repartía con la de ellos dos, sin embargo, durante el resto de temporadas las relaciones entre estos personajes fue evolucionando. House tuvo que enfrentarse a su ex mujer y a los sentimientos que seguía teniendo por ella, Cameron acabó enamorándose de Chase y no fue hasta la séptima temporada cuando Cuddy entró en escena, desvelando sus verdaderos sentimientos hacia House.
En Gilmore Girls, la tensión sexual no resuelta la trataron con la amistad entre Luke y Lorelai. Desde un primer momento queda claro que ellos son la pareja principal de la serie, pero Lorelai parece negarse a aceptar ese hecho y mantiene varias relaciones con otros hombres, hasta decidirse finalmente por Luke. Durante el proceso de este noviazgo, siempre ha habido muchos altibajos que llegó a una ruptura definitiva en su última temporada y no no se resolvió hasta el último episodio de la serie. Aunque, para caso curioso tenemos el de Doctor Who, porque si tienes diecinueve años y te enamoras de un hombre de novecientos años que nunca envejece, tienes claro que vas a acabar sufriendo. Y aunque ese amor es correspondido (él nunca lo dice con palabras pero ¿hace falta que lo diga?), cómo vas a mantener una relación así. Por eso el Doctor decide dejar marchar a Rose, porque sabe que con él no tiene futuro, nunca podrá ser amada como una persona normal, no podrá tener una familia y siempre la pondrá en peligro. Pero Russel T. Davis, guionista de la serie, tuvo la dudosa idea de crearle un clon al protagonista y escribir un final ¿feliz? para Rose Tyler.
A partir de aquí spoilers de Bones, Castle y Chuck
Pero las cosas empiezan a cambiar. Los productores saben que tienen que arriesgarse porque los espectadores lo han visto ya todo. Por eso, Andrew W. Marlowe, creador de Castle, aconsejaba a Hart Hanson, creador de Bones, a que sus protagonistas se decidieran finalmente a acabar con esa tensión. La diferencia entre Castle y Bones es que los primeros son más obvios a la hora de mostrar que se atraen, no lo ocultan aunque no lo acepten. Mientras, en Bones se han llevado años negando lo obvio, y es que están enamorados. Eso ha sido hasta esta última temporada, donde en amabas series, se han decidido a saltar a la piscina. Castle le dice a Beckett que la quiere, aunque el momento sea bastante trágico, pero el que más a arriesgado de todos ha sido Bones. La semana pasada Brennan desvelaba a Angela que se había acostado con Booth, pero con su confesión nos dejaba con la duda de si era real o no. Y cuando pensábamos que esa era la sorpresa definitiva, en el final de temporada Brennan anuncia a Booth que van a ser padres (hay que recordar que la actriz en la vida real, también lo está). Embarazos, confesiones de amor y hasta bodas. Porque Chuck despidió su cuarta temporada con una boda entre Chuck Bartoski y Sarah Walker, aunque el episodio parecía (como ya he dicho en otro artículo) un final de serie, y quizás si no hubiese estado tan en duda el futuro de la serie, no sé si hubiésemos tenido una boda.
Estas tres series han decidido sacarle el dedo a la maldición de Luz de luna, pero habrá que estar atentos para ver si consiguen acabar con ella o le dan más razones para seguir vigente.